Hay muchas maneras de promocionarse sin dinero. A veces no pensamos que lo simple y natural es nuestra mejor carta de presentación por ello, es recomendable tener en cuenta unos detalles básicos que nos ayudarán enormemente en nuestro trabajo para conseguir clientes.
Los ocho puntos más importantes
Bajo mi punto de vista y experiencia personal, hay ocho puntos muy importantes que debes tener en cuenta:
- Dedicación
- Organización
- Constancia
- Paciencia
- Interés
- Ser bueno en lo que haces
- Relaciones públicas
- Creer en uno mismo
Vivimos en plena era donde los autónomos son el modelo de trabajo que más se extiende, e incluye a esos pequeños emprendedores tanto de primera generación, como a esas personas de más trayectoria laboral que por las circunstancias del mercado han decidido dar un paso adelante e intentar promover algo por sí mismos. Parece muy bonito pero los inicios suelen ser muy duros pero con muy poco ya se pueden conseguir logros.
Cuando decidí ser autónoma en 2011, el mayor convencimiento que tenía era la seguridad de que lo que quería hacer. Lo que hacía era lo que más me gustaba pero, sobre todo, creía en mí misma al máximo a pesar de pasar por malos momentos económicos y personales que estaba viviendo, unido a estar en plena crisis económica que no ayudaba a tener muchas esperanzas.
Diferenciación: ¿Qué hago diferente a los demás?
Al principio me promocionaba de una manera más empresarial dando más importancia a la imagen de empresa que al valor personal que ofrecía con mi trabajo, mis conocimientos y mis RRPP que realmente eran “el alma de la empresa”. Tardé un tiempo en dar en la tecla, casi un año, y hasta entonces era una más del montón sin ninguna diferenciación, una empresa, una autónoma, que vende medios publicitarios y que trabajaba por comisión de agencia.
Descubrí la importancia del valor personal en unas clases que asistí de iniciación al mundo digital “Curso práctico de Community Manager”. La tecnología para mí era un mundo lejano pero era muy importante en estos tiempos. El profesor nos hablaba que cada uno ha de ofrecer algo especial al cliente, y que ese algo era lo que nos diferenciaba de los demás y, por ello, teníamos que tener claro quienes éramos y hacía donde nos dirigíamos. Y ahí fue cómo empezó todo y me convertí en “especialista en publicidad exterior”
¿Cómo podía promocionar mi marca personal? y ¿Cómo promocionarse sin dinero? Al final me di cuenta que no necesitaba ni un solo euro, sino tener presentes los ocho puntos que he mencionado al principio.
Objetivos y preparación
Lo que voy a decir ahora seguro que os lo han dicho una y mil veces, pero para promocionarse sin dinero hay que empezar por marcar objetivos y preparar un plan de trabajo con mucho sentido común y sensatez, algo que facilitará mucho la labor. Yo no lo hice al principio por escrito, sino que lo tenía más o menos claro en mi cabeza pero no cabe duda que siempre es mejor detallarlo por escrito para organizarse mejor, revisarlo cuando es necesario y tener un seguimiento. Yo lo hice por escrito a los dos años y medio de haber empezado y me sirvió para mejorar en muchos aspectos y, sobre todo, para avanzar mejor y con más disciplina. Las bases de un plan de objetivos son válidas para cualquier autónomo, particular o empresa. No hace falta estudiar para ello; yo solo tengo estudios básicos, algunos cursos y algo de experiencia en mi trayectoria laboral, pero al final es aplicar el sentido común.
No importa que seas un pequeño autónomo o un particular, haz tu plan.
Para saber promocionarse sin dinero hay que saber muy bien quienes somos, quién es la competencia, quién es el cliente y qué podemos ofrecer mejor que los demás. Analiza bien lo que ofreces: costes, márgenes y, muy importante, tener una partida estructurada de presupuesto económico a invertir. El plan económico es importantísimo, incluso lo recomiendo para las personas particulares porque ayuda a organizarse y controlar los gastos de nuestro día a día. Esto sí que lo hice desde el principio porque necesitaba saber cuánto tenía que vender para cubrir mis gastos mínimos y cuánto tiempo tenía para cubrirlos con lo que tenía en el banco si las cosas no iban como esperaba. En mi caso, mi fondo de maniobra eran tres meses por lo tanto tuve que actuar rápidamente y empecé por mí misma reduciendo gastos personales, además de renegociar una hipoteca. También busqué una empresa del sector porque, al principio, no tenía dinero ni para pagar al proveedor, por ello yo le facilitaba el cliente e íbamos a medias con el beneficio, y así, en mi caso, pude avanzar. Siempre hablo de mi experiencia personal. Se que en cada uno tiene su propia situación personal y por eso mi finalidad con esto es que sirva de referencia cuando alguien lo pueda necesitar.
Actúa desde hoy, no lo dejes para mañana
Al principio fallamos mucho, no pasa nada, eso es bueno porque un error ayuda a mejorar, así que cada fallo es una clase magistral y sobre todo es más experiencia adquirida a nuestras espaldas. No hay que esperar al momento adecuado, el momento es ahora mismo; yo lo hice en plena crisis y sin dinero, no podía permitirme esperar, ya que cada hora y cada día que pasaba era primordial para conseguir resultados. Tampoco hay que echar la culpa a nadie: lo mejor es coger el camino y poner pequeñas metas para conseguir resultados.
La mejor publicidad es la «del tú a tú»
Actualmente las redes sociales han invadido nuestro espacio y están aquí para quedarse, pero no son al 100% suficientes para comunicar. Se consigue mucho con lo más básico y primitivo: comunicando como hemos hecho toda la vida, hablando cara a cara con una persona. Esa va a ser la mejor publicidad para promocionarse sin dinero; la que diga la gente que te conoce de una manera presencial y, por consiguiente, esas personas te ayudarán a promocionarte mejor en las redes sociales.
Dicho esto, para promocionarse sin dinero, hace falta hacer muchas relaciones públicas. Da igual que seamos una ONG, un escritor, un representante, un instalador de aire acondicionado, … la mejor publicidad se consigue relacionándose con la gente presencialmente y para ello, hay que hacer un plan y organizarse. Si se hace este paso, tenemos al menos algo ganado y nos ayudará enormemente en muchos aspectos.
Seguro que os preguntaréis una y mil veces por qué algunas personas que no son tan buenas como nosotros tienen trabajo o éxito, y es por esto.
Lo importante es ponerse manos a la obra cuanto antes. ¿Quién mejor que empezar por uno mismo? Cuando te des cuenta serán los demás quienes hablen de ti.
A continuación, comparto lo que más me ha ayudado a promocionarme de manera gratuita.
- Imagen: vestimenta adecuada y cuidado personal. Utiliza tu vestuario para adaptarlo a cada situación. Hoy en día hasta con unos vaqueros puedes ir bien vestido, pero cuida la imagen y que sea coherente con lo que ofreces.
- Actitud: ha de ser adecuada a la situación: tonos de voz, vocabulario, predisposición, simpatía… menos es más. El saber estar es algo a tener en muy en cuenta también, como por ejemplo evitar la bebida en eventos y reuniones, malos hábitos, etc. Se trata de conseguir clientes y prescriptores, y una buena actitud, ayudará a ser recordado de una manera positiva, algo que te ayudará muchísimo a promocionarte.
- Redes Sociales: esto es muy importante. Las redes sociales dicen muchísimo de nosotros. No hace falta estar en todas; las más usadas a nivel personal son Facebook e Instagram, así que cuidado con lo que ponemos. A nivel profesional está LinkedIn, y en esta sí que tienes que tener un perfil en condiciones. Antes de empezar a promocionarte, ten LinkedIn bien completo y con una foto que se te reconozca. En Internet puedes encontrar muchos tutoriales que te pueden ayudar. Lo ideal es unificar fotos de perfil en todas las redes sociales y que haya una coherencia si van a estar expuestas a todo el mundo. Interactúa con la gente que te interesa para negociar sin ser pesado, con mucho tacto y con coherencia, si no parecerás muy interesado.
- Tarjeta de visita: no hace falta que sea física, ya que cuesta dinero, pero siempre te puedes hacer una virtual gratuita, como por ejemplo Aboutme. También puedes utilizar los chats o aplicaciones de comunicación; hoy en día móvil en mano, os buscáis en LinkedIn en el mismo momento si procede, o compartís teléfono por WhatsApp.
- Discurso: preparar el texto de lo que dirás cuando te presentes: quién eres, qué haces y también estaría bien que mencionaras a algunos de tus clientes. Si no tienes ninguno, menciona la mejor cualidad o diferenciación de la competencia. Es muy importante no ser pesado: un discurso optimizado de 30” será suficiente, y si hay oportunidad, ten preparado alguno más extenso pero, sobre todo, no ser tedioso ni entrometido. Si hablas de algo personal, como por ejemplo temas familiares, aficiones, estudios, etc., ser comedido, buscando siempre lo que te une con la persona que hablas. Cuando la gente habla da pistas, así que hay que estar atento y utilizar esa valiosa información con cuidado.
- Información actual: estar al día de las noticias y temas de actualidad y, sobre todo, estar muy informado del sector al que nos dedicamos. Se trata de tener temas de conversación. Si vas a un evento de algo concreto, intenta informarte del tema y saber quiénes lo han organizado para presentarte.
- Evitar conversaciones incómodas: tipo político, religión, género o incluso de fútbol, aunque siempre hay excepciones; si sois afines, podría hacerse una excepción. De lo contrario, podría generarse una situación incómoda, así que evita hablar de ello o empleando respuestas neutras, y cuando puedas, cambia la conversación o simula una llamada de teléfono para cortar de inmediato.
- Agenda de eventos: hoy en día puedes ir a mil eventos de todo tipo de forma gratuita. Busca colectivos de tu sector, en la Cámara de Comercio, asociaciones, etc. En las mismas redes sociales hay muchísimos; eso sí, al principio te costará coger el hilo, ya que no se trata de ir a todo sino a los adecuados. Personalmente he ido a los eventos más tontos, y ahí he conseguido contactos que se han convertido en clientes, así que nada es malo, pero esto te llevará un tiempo hasta hacer una rutina de eventos a tu gusto. Aunque es más cómodo ir acompañado, te recomiendo ir sin acompañante, ya que este detalle te permite movilidad y no estar pendiente de esa persona que igual viene contigo por cortesía. Se trata de relacionarte al máximo con personas, que te pongan cara y te recuerden.
En futuros artículos, ahondaré con más detalle en estos puntos, además compartiré muchos otros trucos útiles. De momento esta muestra es suficiente para empezar y tengas una idea básica.
Y si sale bien, invierte un poco
Si con el tiempo la economía acompaña, recomiendo asociarse a algún colectivo o asociación del sector o empresarial. Hay algunos muy buenos que por unos 10€ / 15€ al mes puedes ser miembro y esto también te ayudará mucho.