Historia de la publicidad exterior hasta la Edad Media

¿De dónde viene la Publicidad Exterior?

La historia de la publicidad exterior  es amplia y resumirla en pocas palabras es bien complicado por lo que hoy os hablaré de sus inicios hasta la Edad Media. A continuación veréis porqué es uno de los medios de comunicación más antiguos del mundo.

Un detalle importante en la historia de la publicidad exterior, es que prácticamente no existe mucha variedad de imágenes de cómo era la publicidad en la antigüedad. Todas las culturas han utilizado las paredes para comunicar con libertad sus mensajes, pero no podían ser reproducidos hasta el descubrimiento de la imprenta en el siglo XV.

Historia de la publicidad exterior

Antiguamente la publicidad exterior se dibujaba en paredes y muros

Hasta la Edad Media lo más destacado fueron los jeroglíficos de los egipcios, que utilizaban sobre los muros para comunicar mensajes a su gente.

Historia de la publicidad exterior

Otras fueron las pinturas en las cavernas con mensajes comerciales entre mercaderes en Sumeria allá por el año 2.700 a.C. En la ciudad persa de Lidia se hacían huecos en las paredes para mostrar con escaparates sus productos. Otros ejemplos estuvieron en Antioquía (Turquía), donde aún quedan señales de lo que pudo ser una valla publicitaria para señalizar un negocio, al igual que en las civilizaciones griega y romana donde también se hallaron señales de misma índole. El anuncio más antiguo que se conoce es el papiro encontrado en Tebas, que data entre el año 2.000 y 3.000 a.C. En él anunciaba una recompensa para encontrar un esclavo huido. El papiro está  expuesto actualmente en el British Museum de Londres.

Historia de la publicidad exterior

Los entendidos en historia indican que estos mensajes eran más bien anuncios y no publicidad, destinada a la persuasión para la compra ya que cubrían necesidades diferentes, y se insertaban de manera distinta debido a que la mayoría de la gente no sabía leer ni escribir, por lo que el uso actual de la publicidad como forma de incitar a la venta se aplica más bien en la época contemporánea.

La historia de la publicidad exterior en España

En España, las pinturas de Altamira pueden considerarse exponentes de publicidad exterior.
Historia de la publicidad exterior

En las ciudades donde existían establecimientos comerciales y ante la inexistencia de nombres en las calles, se hacía imprescindible el uso de señales para informar a los clientes analfabetos. Un ejemplo bastante actual serían las placas cerámicas, que por su dibujo indicaba la situación (nombre) de una calle. Una muestra conocida por muchos de nosotros está en el centro histórico de Madrid, donde sus placas cerámicas, además del valor histórico actual, informan los más variados nombres de sus calles. Sin embargo, en la época antes de Cristo simplemente se utilizaban objetos para indicar el servicio de un negocio. Por ejemplo, una piña colgada en la puerta indicaba una taberna, una cabra te informaba de una lechería o una mula que portaba a lomos un molino indicaba una panadería. Muchas eran las maneras de invitar a los vecinos a entrar en sus tiendas.

Historia de la publicidad exterior

Como veréis se informaba con elementos simples para cubrir las necesidades más elementales, aunque también es curioso el uso de un pene dibujado o esculpido en una piedra para señalizar un prostíbulo.

Historia de la publicidad exterior

Actualmente el soporte publicitario más habitual que sustituye a todos estas muestras serían los rótulos de los comercios; estos, junto con las placas de las calles, son sin lugar a dudas el soporte de comunicación exterior más extendido del mundo.

La historia de la publicidad exterior en la antigua Grecia, Roma y Pompeya

Los “kyrbus” y “axus” eran los manifiestos de publicidad exterior en la antigua Grecia. Los “alba” o “libelli” eran los exponentes de publicidad exterior en Roma. Los libreros de Pompeya según parece, utilizaban la tablilla de anuncios, alba (álbum en singular), para dar a conocer los libros aparecidos. Los “alba” eran espacios rectangulares en la propia pared blanqueados con cal (también podían estar horadados en otras superficies además de en la roca, como en la madera o terracota) en donde se pintaban los anuncios. En Pompeya se encontraron veinticinco albas en los puntos más concurridos de la ciudad donde predominaban los colores rojo y negro. Incluso ya eran utilizados para las campañas políticas de la época y más tarde servirían para indicar el nombre de una calle.

Historia de la publicidad exterior

Es  precisamente en Pompeya donde se han encontrado gran cantidad de pintadas o grabados sobre piedra o madera, algo que nos indica que fue en la antigua Roma donde se originaron los primeros grafitis.

Historia de la publicidad exterior

Lo más similar a un cartel publicitario eran los postes cuadrados de piedra o madera que se utilizaban para anunciar noticias, avisos oficiales, concursos de gladiadores, espectáculos circenses o el alquiler y venta de esclavos. En general, estos espacios publicitarios estaban controlados por el poder.

Otro formato de publicidad de la época era los “libellus”, que eran escritos en papiro con algún dibujo representativo y que se colgaban en las paredes o en las puertas de teatros o circos.

Como veréis la historia de la publicidad exterior tiene mucho más que contar y mucha de la información que habéis visto entre otras muy interesantes la podréis ampliar en esta web de la historia de la publicidad donde me he informado para hacer este artículo. En siguientes artículos profundizaré desde la edad Media hasta la actualidad.